El proyecto se ha sustentado durante 2024 en un modelo de intervención comunitario, donde la persona no es solo usuaria de servicios, sino miembro activo del grupo, sujeto de derechos y motor de transformación colectiva.

Principios del enfoque comunitario aplicados:

• Participación horizontal en la toma de decisiones: asambleas semanales, tertulias, propuestas y diseño compartido de actividades.
• Sentimiento de pertenencia y cuidado colectivo: el espacio se cuida entre todas, se decoró en fechas señaladas, se organizaron fiestas y jornadas.
• Empoderamiento social: quienes estaban en situación de exclusión pasaron a dinamizar tertulias, recibir a visitantes, o liderar talleres.
• Acompañamiento mutuo: entre personas usuarias se han generado redes espontáneas de apoyo emocional, intercambio de información y ayuda digital.